Bueno pues otra vez, te felicito por aquí. Y me suena una redundancia enorme cada felicitación que te hago, pero es que no sé que voy a decir a parte de que me alegro muchisimo de haberte conocido, gracias por estar ahi siempre cuando lo necesito y cuando no también. Gracias por las risas y los llantos, por los momentos bonitos y los no tan bonitos, pues todos son especiales y únicos y no los cambiaría por nada en el mundo. Ya sabes que eres mi talón de Aquiles, y el niño mimado de Little Aerith, que hay que reconocer que a veces me paso de buena contigo eh?? xP Pero me gusta serlo porque pienso que te lo mereces ^^
Un besote y que cumplas muchos más Cloudsin, sabes que siempre aquí estaré para ti.
Otro clásico. Este sabor me encantaba, pero lo acabé aborreciendo.
-Esa es tu historia, Naira.
-Naira... Qué ridículo.
-¿Qué?
-Nunca en mi vida he sido ella.
-No te equivoques. La vida que has vivido, no ha sido mentira. Simplemente no podíamos abriros los ojos hasta que no llegáseis por vuestro propio pie a nuestras puertas.
-¿Qué importa ahora si fue verdad, si ya soy otra persona distinta?
-Sólo has cambiado. Todo en este mundo lo hace. La tierra, las criaturas, incluso los elementos. -Deberías sentirte afortunada. A partir de ahora, no volverás a cambiar. Vivirás eterna.
-Pero ya no soy humana. Soy Aniobe, hija de Hemera.
-Eso lo sentías ya desde hace mucho. Desde el día en que despertaste tras tu sueño.
-Pero jamás imaginé que acabaría siendo el monstruo que soy ahora.
-¿Te estás escuchando? ¡Pero si eres Aniobe! ¿Un monstruo? ¡Tu madre fue la Deidad más bella de cuantas nacieron de Caos!
-Nix la envidiaba por haberla hecho tan perfecta. Lo sé, ya me lo has contado. Pero soy incapaz de sentirme una diosa sabiendo cúantos han muerto para que yo viva.
-Podrás vengarlos. Ahora eres la Deidad reina. Tus poderes son incompables, puros, puesto que tu sangre es la menos diluída. Esto es algo que el resto acepta. Zenetha te seguirá sin reservas, y Orto, aunque no guarde tu simpatía, será muy útil por sus ansias de batalla.
-...¿Y cuál es el precio que he de pagar?
Otro dia pasa en mi vida sin pena ni gloria. Como ayer. Como mañana. Y yo inamovible, le guardo un rinconcito a la esperanza. Qué triste es ser un soñador que nunca duerme.
Y entre el miedo y pasiones anhelo mi inocencia perdida. Cansada estoy de vivir amores de compañía.
''Pon flores salvajes en mi pelo y un lobo a los pies de mi cama, pájaros blancos en mi pasillo, sombrillas en mis ventanas, porque mis viejos sueños han caducado como una botella de leche y los nuevos se han perdido sin que nadie los aproveche.''
''Y en el principio, Caos era el regente de todo. Era aire, vapor y niebla. Ello, lo eterno, tenía como función mantener unidos cielo y tierra. A pesar de ser informe, era toda la existencia. Todo lo inmaterial residía en él: Amor, Bien, Justicia… así como Dolor, Mal, Inmoralidad. Aún así, estaba internamente dividido en 4 partes, que le hacían ser el todo.
Pasaron muchos siglos de su vida en el Cosmos, hasta que llegó el día de la Fisión. La existencia había madurado, y el Cosmos estaba preparado para un paso más. El origen de las Deidades. Caos ya había crecido cuando éstas se les fueron extirpadas.
Nix, la Noche, fue la primera en aparecer, por ser lo más abundante en el Cosmos. Su reinado habría aún de durar muchos años, por lo que se personificó. Fría y oscura, adoptó forma de mujer. Cubría toda la existencia, dominándola por completo, cielo y tierra, los lugares donde Caos no alcanzaba a dominar.
Pero se sentía incompleta, necesitaba compañía. Así, se presentó frente a Caos, y arrancó de él a un hermano.
Erebo, La Oscuridad, personificación de las sombras, que llenaba todos los rincones y agujeros del mundo. Se decía que sus densas nieblas de oscuridad rodeaban los bordes del mundo y llenaban los sombríos lugares subterráneos.Tomó forma de varón, para unirse a su hermana.
Ellos dos juntos dieron lugar a dos hermanos más:
Hemera, el Día. Encarnada fémina, adquirió las cualidades contrarias a su antónima Nix: calídez y grandiosidad, fue la más bella de todas las Deidades nacidas.
Eter, el Albor. Personificación del espacio y el paraíso. Era el aire alto, puro y brillante que salía cada vez que Hemera le abría paso tras ella.
Y así, de las tinieblas, nació la luz.
Cuando todo se halló en orden, y los cuatro hermanos encontraron sus lugares en la Creación, Caos vomitó la última parte de él. De la primera, nació Nix. De la segunda, ésta creó a Erebo. El último ser de Caos, encarnó la Creación terrena:
Gea, la Tierra. Diosa más fértil tras su hermana Nix, que a tantos seres daría origen con el paso de los años. Gea se atribuyó el poder de albergar las creaciones de ésta, y de cuidarlas y protegerlas. Pero para ello, necesitaría un guardían que la ayudase.
Así Nix, con mucho esfuerzo, ayudó a su hermana Gea a formar a la última deidad:
Urano, el Cielo. Igual que su esposa reinaría en la Tierra, el controlaría el dominio celestial, el cielo estrellado, en continúa supervisión de sus cuatro hermanos anteriores, que serían los que regirían las vidas de tantos seres como residiesen en ellos.
Repartidos quedaron, pues Nix, Erebo y Egea, en la parte inferior de la creación, y Urano, Eter y Hemera, en la superior, unidos por el origen de todo, Caos, el que tras unos años, adquirió forma humana también...
Adelanto de mis cosillas :D
Espero que gusten! Mitología made in Noelia, aun con bases 'empíricas' xD
So I'll stay out all night: Get drunk and fuck and fight until the morning comes, I'll forget about our life.
